En las últimas semanas, las exigencias en defensa de la educación pública en Argentina se hicieron notar a través de medios y redes sociales. Puesto que, el gobierno de dicho país ha optado por recortar el presupuesto sobre las universidades públicas, desencadenando una serie de limitaciones como, poner en riesgo el funcionamiento y mantenimiento de infraestructuras, afectando al plantel docente y administrativo, y por consiguiente a miles de estudiantes. 

Estas exigencias se han expresado a través de manifestaciones en las principales calles de la ciudad de Buenos Aires, pero lo único que han recibido como respuesta, es una crítica por parte del mandatario del país, quien define y ubica el debate a la educación gratuita como un tema ideológico y partidista. Lo anterior, ha despertado un mayor descontento en los estudiantes, ya que si no es otorgado el presupuesto designado para la educación superior, esta será inviable. 

Las calles se llenaron de carteles alzados con citas como: “Si la universidad está vacía, ¿de qué llenamos el futuro?” Porque claramente este conflicto sobre la educación gratuita evidencia el incumplimiento de uno de los principales Objetivos de Desarrollo Sostenible: La educación de calidad. Este objetivo propone garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad y promover oportunidades de aprendizaje durante toda la vida para todos. No obstante, es evidente que esta crisis económica está obstruyendo que los estudiantes argentinos y extranjeros que escogieron al país como casa educativa, reciban plenamente el derecho a una educación de calidad y se compliquen sus objetivos académicos.

Lo alarmante de esta situación, es que regionalmente la mayoría de países de América Latina se enfrentan a esta clase de crisis, en donde la educación se ve perjudicada, aunque esta debería ser uno de los pilares fundamentales. De hecho, El Salvador es otro país que actualmente está atravesando un problema similar, puesto que no se ha entregado el presupuesto designado para la única universidad pública del país, siendo una situación alarmante, ya que a futuro esto afectará principalmente a los estudiantes.

Es más, diferentes estudios como el realizado por el Banco Interamericano de Desarrollo División de Educación, señala en el último informe sobre el estado de la educación en América Latina, que el desarrollo educativo presenta una alta heterogeneidad entre los países de la región, y claramente hay un alto rezago con respecto a los países más desarrollados. 

Claro el desarrollo educativo. mejores tecnologías y financiamiento adecuado, son unos de los recursos que los países de primer mundo tienen la fortuna de usarlos a su favor. De manera que, Latinoamérica debe plantearse medidas concretas para garantizar que todo estudiante tenga acceso a una educación que le ayude a capacitarse como profesional integral. 

Por el momento, Argentina continúa luchando en defensa de sus exigencias, ya que muchos estudiantes han podido continuar con su proceso educativo gracias a que la educación superior sea gratuita. En definitiva los estudiantes esperan que esta situación crítica tenga una solución pronta, ya que si no hay acceso a esta educación de calidad, habría como resultado un retraso en el desarrollo sostenible. Porque la educación es la única herramienta que desarrolla las habilidades de los individuos, potencia sus oportunidades y es un derecho al cual no se está dispuesto a ceder.

Cuando hablamos de moda sostenible, seguramente se te viene a la mente “tejidos orgánicos”, “upcycling” o “prendas de segunda mano”.

Y es que ya no solo las pequeñas marcas o pymes de moda sostenible las usan. Sino también las marcas de fast fashion. O por lo menos, así muestran en las etiquetas de sus prendas con un sello que muchas de las veces son creadas por su propio departamento de diseño gráfico, al ponerle hojas verdes, simulando la madre natura, ya son súper sostenibles y cuidan del planeta.

Sin embargo, para ser, tener y crear una marca de moda sostenible, las acciones a tomar en cuenta van más allá de los tejidos que decidamos utilizar. Y conforme vayamos escalando nuestros negocios, los cuellos de botella y desafíos se irán haciendo cada vez más grandes.

La moda al igual que el resto de industrias tiene un sistema de producción que se compone de pasos. Y cada paso tiene su importancia para lograr una cadena de valor totalmente circular. No sirve de nada que decidamos utilizar solamente lino orgánico para realizar nuestras colecciones, si vamos a derrochar el 40% de nuestro tejido creando la colección de temporada, y pagando menos de 1 dólar al día a trabajadores y confeccionistas de la India que tienen que trabajar más de 12 horas al día, con sus bebés a lado y sostener a su familia de 3 o más integrantes.

Cuando hablamos de sostenibilidad, y si eres un consumidor que conoce y apoya la moda sostenible, sabes que esta se enfoca en tres pilares fundamentales: En el ambiental, en el social y en el económico.

Por esta razón, para ponernos más críticos, al utilizar tejidos sostenibles estaríamos abarcando la parte ambiental, o tal vez la parte social, si nuestro enfoque y objetivo fuera proteger la salud de la piel de los bebés con tejidos libres de tóxicos. Pero ¿Y la parte económica? ¿El sustento digno de las familias que forman parte de nuestro personal? ¿Su salud, sus derechos, su crecimiento y formación continua? ¿Los desechos textiles que generamos en cada proceso de corte? ¿Las muestras que realizamos para verificar los fittings de las prendas? ¿El transporte que utilizamos para cada fase de nuestra cadena de valor ¿Dónde quedan? ¿Dónde las reflejamos y las visibilizamos para nuestros clientes?

Es por esto, que nunca podemos definirnos o ponernos etiquetas de 100% sostenibles. Porque es una utopía, hasta el momento, ideal pero nada real. Sin embargo, no podemos olvidarnos de que el planeta nos ha puesto un temporizador gigante, y que existen varias organizaciones sin fines de lucro a nivel global como la ONU que nos ha planteado una Agenda de objetivos para 2030 desde la cual plantear nuestro siguientes pasos y de la cual ya solo nos quedan 6 años de ajustarnos los cinturones y apretar.

Es por esto, que debemos pensar más allá de la caja y proponer nuevas y mejores maneras de diseñar, de crear, de vestir y de disfrutar de la moda. Porque hablar de  cambio no necesariamente es sinónimo de menor disfrute, de menos opciones o de una moda aburrida. ¡Al contrario! Se nos abre un camino lleno de posibilidades y soluciones para implementar. Y así, experimentar una vida más presente, más humana, inclusiva y real. Repensar una moda en base a nuestros valores e ir más allá de una simple etiqueta.

En Colombia, la sostenibilidad hídrica se ha convertido en una preocupación urgente para las empresas en medio de la creciente escasez de agua. En un intento por abordar este desafío, diversas empresas han implementado estrategias innovadoras para conservar y utilizar eficientemente este recurso vital.

La escasez de agua es un problema cada vez más acuciante en Colombia, con implicaciones significativas para el sector empresarial. Frente a este desafío, empresas de diversos sectores han adoptado medidas proactivas para enfrentar la situación.

Según un informe reciente publicado por Vanguardia, varias compañías han implementado estrategias sostenibles para garantizar el uso responsable del agua en sus operaciones. Entre las medidas destacadas se encuentran la implementación de tecnologías de reciclaje y reutilización del agua en los procesos industriales. Empresas manufactureras han invertido en sistemas de tratamiento de aguas residuales para reducir su impacto ambiental y garantizar un uso más eficiente del recurso.

Además, se han promovido prácticas de conservación del agua en la cadena de suministro, incentivando a los proveedores a adoptar políticas y tecnologías que minimicen el consumo de agua en todas las etapas de producción y distribución.

El informe también destaca la importancia de la sensibilización y educación sobre la sostenibilidad hídrica entre los empleados y la comunidad. Algunas empresas han lanzado programas de concienciación para promover el uso responsable del agua tanto en el ámbito laboral como en el personal.

En palabras de María López, gerente de sostenibilidad de una empresa líder en el sector de la alimentación en Colombia: "La escasez de agua es un desafío que afecta a todos. Como empresa, tenemos la responsabilidad de actuar de manera sostenible y contribuir a la conservación de este recurso tan preciado".

Aunque los desafíos son significativos, estas iniciativas muestran un compromiso creciente por parte del sector empresarial colombiano en la búsqueda de soluciones innovadoras y sostenibles frente a la escasez de agua.

La sostenibilidad hídrica se ha convertido en una prioridad para las empresas colombianas, que buscan abordar la creciente escasez de agua mediante la implementación de estrategias innovadoras y responsables. Con un enfoque en la conservación, el reciclaje y la sensibilización, estas empresas están liderando el camino hacia un futuro más sostenible y resiliente en términos hídricos.

Ante la urgencia de la situación, se espera que más empresas se sumen a estas iniciativas y colaboren activamente en la preservación y uso responsable del agua, contribuyendo así a un desarrollo económico más sostenible y equitativo para Colombia y el mundo.

La educación es un pilar fundamental para el desarrollo humano y el progreso de las sociedades. Reconociendo la importancia de este aspecto, la Organización de las Naciones Unidas para la
Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), en colaboración con Learning by Helping, una agencia y academia que se dedica a crear y enseñar a crear proyectos de impacto social, ambiental y económico, ha lanzado una iniciativa de un proyecto sostenible en el tiempo sin precedentes y ha sido destinada a fortalecer el sistema educativo en Latinoamérica.

El proyecto surge en un momento crucial para la educación en la región, donde persisten brechas significativas en el acceso y la calidad de la educación. La formación de docentes juega un papel fundamental en la mejora de estos aspectos, ya que los docentes son agentes clave en la transformación del sistema educativo y en el desarrollo integral de los estudiantes. La convocatoria está dirigida a docentes de todos los niveles educativos, desde la educación inicial hasta la educación superior. Además, se invita a profesionales interesados en el ámbito educativo a participar en esta oportunidad de formación y desarrollo profesional. Se espera que los participantes adquieran competencias y habilidades actualizadas en áreas como metodologías de enseñanza innovadoras, uso efectivo de la tecnología en el aula, estrategias para la inclusión educativa y atención a la diversidad.

La formación se llevará a cabo a través de cursos en línea, materiales didácticos especializados y recursos educativos diseñados por expertos en el campo de la educación. Los participantes también tendrán la oportunidad de participar en actividades prácticas y colaborativas, promoviendo así el intercambio de experiencias y prácticas entre docentes de diferentes países de la región.

La convocatoria estará abierta durante un período determinado, y los interesados pueden encontrar más información y registrarse a través de la página oficial de ambos colaboradores. Se espera que esta iniciativa contribuya no solo a fortalecer las habilidades y competencias de los docentes, sino también a fomentar una cultura de colaboración y aprendizaje continuo en el ámbito educativo latinoamericano. Durante el transcurso de los seis meses que abarca esta certificación, los participantes se adentrarán en el universo de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), no sólo comprendiendo su significado, sino también explorando su funcionamiento dentro del contexto institucional y el entorno global dedicado a su consecución. Se les proporcionarán herramientas fundamentales de innovación social que les capacitarán para idear proyectos y soluciones con un impacto duradero.

La metodología educativa de Learning by Helping ha sido cuidadosamente diseñada para integrar una variedad de conceptos y estrategias pedagógicas. El objetivo es que al completar la certificación, los participantes puedan aplicar con éxito estos conocimientos en sus entornos de enseñanza, promoviendo así la formación de una nueva generación que valore y comprenda la importancia del desarrollo sostenible.

Es por esto que, su colaboración con UNESCO representa un compromiso firme con la mejora de la educación en Latinoamérica y con el desarrollo de sociedades más justas, inclusivas y prósperas para las generaciones futuras; así mismo, esta formación no solo ofrece educación de alta calidad sin costo alguno para los gobiernos, sino que también aborda uno de los mayores retos a nivel global: fomentar un esfuerzo conjunto hacia el desarrollo sostenible.