Por Ignacio Martín Baroni. @ignacio.baroni
“La naturaleza no es muda”, escribió Eduardo Galeano, y los pueblos originarios de Latinoamérica la oyeron desde siempre. Al oír, sienten; y al sentir, empatizan; y al empatizar, cuidan y conviven en armonía con ella. Saber escuchar significa saber transmitir. Las voces ancestrales viajan a través de los vientos, susurran entre las montañas y el susurro hace eco, caminan los pastos y se posan en las plantas, hablan.
Nacida en el noroeste de Argentina y becada a Universo Mola Fashion Week, Alkimia Textil Ancestral es una marca jóven de diseño de indumentaria consciente y sustentable que, a través de costumbres y técnicas milenarias y artesanales, revaloriza y da a conocer su historia y su cultura andina.
Utiliza elementos de la naturaleza para el teñido de hilos y telas, asimismo, las prendas que confecciona son biodegradables. En su colección Wiñay Pacha, que en quechua significa “para siempre” o “eternidad”, su diseñadora, Natalia Orozco, cuenta que se basó en las antiguas construcciones de piedra características de las civilizaciones originarias de los Andes, resignificando recortes y uniendo textiles remanentes de su producción. Asimismo, desde la morfología y la tipología, hasta el packaging y el tono de voz, busca agregar un valor intangible que refleje su historia y la de su región. La conexión con lo natural y el cuidado de su ambiente son enseñanzas que llegan desde lejos en el tiempo.
La naturaleza no es muda, el patrimonio tampoco, y se mueve. Alkimia Textil Ancestral supo oír y transmitir. Hacer florecer las raíces y el sentido de identidad contribuye a elevar la calidad de vida de comunidades e individuos desde el triple impacto: social, ambiental y económico. El patrimonio cultural permanece y se transforma para ser retransmitido a nuevas generaciones y a distintos pueblos y culturas.
Imagen extraída de la página de la marca: https://alkimiaancestral.mitiendanube.com/