En Estados Unidos, actualmente viven cerca de 23.2 millones de mujeres inmigrantes, las cuales representan aproximadamente el 14% de la población femenina del país. Las mujeres nacidas en México representan el 22.1%, seguidas por países como la India con un 5.6%, Filipinas 5.2 % y China 5.1%, según el análisis realizado por American Immigration Council. Pero, estas cifras pueden aumentar debido a las políticas migratorias de Joe Biden.
Las mujeres inmigrantes son expuestas constantemente a situaciones que las ponen en posiciones vulnerables. El desconocimiento del idioma y de las leyes son agravantes de estas situaciones, junto con el aislamiento familiar y la falta de acompañamiento. Según ONU Mujeres, en su informe From evidence to action: Tackling gender-based violence against migrant women and girls, “es probable que las mujeres y las niñas experimenten un continuo de violencia de género en todas las etapas de la migración, desde Bullying y abuso verbal, físico, psicológico y violencia sexual”.
Si bien, como mujer siempre se está expuesta a vivir esta clase de violencias, las mujeres refugiadas o inmigrantes son expuestas a situaciones únicas. Así como lo expresa La Oficina para la Salud de la Mujer (OWH), el miedo a ser reportadas o de perder la custodia de sus hijos son dos de las principales razones que impiden que las víctimas se rehusen a denunciar a sus agresores. Así como también lo son:
- Sentirse humilladas por su comunidad
- Creencias socioculturales
- Fallar en la labores del hogar
- Recibir información falsa sobre los deberes que tiene como esposa, los cuales la obligarian a estar con su esposo sexualemente
Estados Unidos ha buscado proteger a las víctimas de violencia física, emocional, sexual y doméstica, brindandoles apoyo psicologico y refugio a través de La Ley de Violencia contra las Mujeres (VAWA). Esta ley entró en vigencia en Octubre de 2022 y a pesar de su nombre, esta se encarga de amparar a todas las personas sin importar su género, orientación sexual, identidad de género o estatus migratorio. Así mismo, la OWH invita a las víctimas de violencia a denunciar a su agresor sin importar que sea un ciudadano estadounidense o no.
Estados Unidos cuenta con la Línea Directa Nacional contra la Violencia Doméstica o Hotline en inglés, la cual funciona 24 horas los 7 días de la semana y a través de la cual las víctimas pueden pedir ayuda en situaciones de emergencia. Así mismo, son muchas las fundaciones y organizaciones sin ánimo de lucro que se encargan de brindar apoyo a las mujeres inmigrantes en aspectos legales, psicológicos, de traducción, emocionales y físicos. Un ejemplo es el Centro contra la violencia sexual y familiar (CASFV), que desde 1977 ha estado a disposición de las familias y de las victimas y, entre algunos de sus servicios, esta el que presta un grupo de voluntarias que ayudan a las mujeres a transcribir y traducir sus historias de vida para asi poderlas presentar en la corte, cuando están en medio de procesos legales en contra de su agresor.
Ser mujer migrante no es fácil, los retos y los estereotipos están constantemente puestos en el camino que se debe transitar y es nuestro deber informarnos sobre nuestros derechos. Por eso, te invitamos a que compartas este artículo con tus conocidas, aprovechemos y divulguemos esta información y así, tal vez, llegue a manos de alguien que lo esté necesitando.
